Los sujetos que ingresaron de manera ilegal a Chile se encuentran en prisión preventiva ya confesos por asesinato.
Por Diversomos
15/06/2022
La Policía de Investigaciones de Chile detuvo a una tercera persona involucrada en el asesinato de Yuridia Pizarro, mujer trans cuyo cuerpo fue encontrado en la caleta Caramucho de la ciudad de Iquique, región de Tarapacá.
La gestión a cargo de la Brigada de Homicidios de la ciudad realizó la detención del tercer involucrado, un ciudadano colombiano que ingresó de manera ilegal al país, el cual tras su captura pasó a disposición del Juzgado de Garantía quedando en prisión preventiva.
El Arresto del sujeto, se suma a las dos realizadas previamente, las que dejaron como saldo a dos hombres de la misma nacionalidad, detenidos por ser responsables en deceso de mujer desaparecida desde el 29 de mayo del presente año.
De acuerdo a Janka Pierola Pizarro, sobrina de persona fallecida, informó que cuando una vecina del sector se percata de la desaparición dio aviso a familiares de su tía, quienes durante el día 30 preguntan por Yuridia al hombre, de nacionalidad colombiana, que trabajaba en la panadería hacia un año.
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Janka comenta que el sujeto relata que su tía viajó a Bolivia a participar de unas festividades. La familia revisa el domicilio y observa que pertenencias personales se encontraban de manera desordenada en el hogar, donde la ausencia del furgón utilizado en las compras para la panadería, generó sospechas de alguna presunta participación del hombre que trabaja con Yuridia.
Ante las sospechas familiares deciden dar aviso de presunta desgracia a Carabineros. Las pertenencias en desorden, y el hecho que Yuridia no realizaba viajes sola a Bolivia, suscitó desconfianza en el sujeto actualmente detenido.
Detalles del crimen de Yuridia
Néstor Cuellar, de 29 años, se encontraba caminando por la carretera cuando Carabineros lo encontró, en ese momento el sujeto les dice ser “testigo” de un asesinato. La confesión del imputado logró dar con su cuerpo luego de cuatro días desaparecido.
Cuellar, quien ingresó ilegalmente por Colchane señala que, a pesar de llevar pocos días en el país, visitaba la casa de Yuri para almorzar, o tomar cervezas, con Jonathan, quien vivía hace un año con la occisa, y era el que oficiaba de anfitrión en la casa.
“Fui solo a la casa de Pedro con el fin de comprar pan. Ingresé a la casa y observé de manera inmediata que Pedro estaba discutiendo con Jonathan en la cocina. No recuerdo qué cosas se decían. Jonathan le pegó tres combos en la cara a Pedro, quedando contra la pared de la cocina, para luego tomarlo del cuello con la mano derecha y empezar a asfixiarlo mientras le decía “usted lo que merece es morirse”, señala.
El relato de Néstor continúa: “Pedro se desvaneció cayéndose de espalda contra el piso, oportunidad en la que Jonathan se abalanzó sobre él comenzando a apretarle el cuello nuevamente, pero con las dos manos, permaneciendo en esa posición por largo rato, como unos 10 minutos más o menos, observando que falleció en ese momento.
Y antes de que quisiera arrancar -declaró el testigo-, Jonathan, vestido con una polera negra con cuello y un pantalón de mezclilla del mismo color, lo amenazó a él con un cuchillo y bramó: “Si dices algo te mato a ti y a toda tu familia en Colombia”.
Relatos contradictorios entre los detenidos
Un tercer involucrado en el asesinato es Luis Ballesteros alias “El Chutas”, el sujeto de 41 años, ingresó de manera ilegal a Chile por Colchane en compañía de su hijo de 14 años, a través de Facebook, se contactó con Jonathan, a quien ya lo conocía, y quien le alojó en casa de Yuri hasta que fue echado un día antes del asesinato.
“Estaba enojado con Jonathan porque le había fallado, no sé en qué, pero nos dijo que nos fuéramos para siempre y que nos lleváramos todas nuestras cosas, por lo que tomamos nuestras pertenencias y nos fuimos a la calle”, señala Luis.
El día 29 de mayo, Jonathan va en búsqueda de Luis en el furgón de la panadería, cuando los encuentra les comenta que Yuri viajó a Bolivia y regresaría luego de un mes. Cuando volvieron a la casa, la situación cambió, en palabras de Luis:
“Cuando llegamos a la casa, Jonathan me confesó que había matado al Pedro. Después lo echó en el furgón y lo fue a enterrar al desierto. No me dijo si fue solo o acompañado, tampoco detalles claros de dónde lo enterró, diciéndome además que Pedro tenía plata en una cuenta y que él era el que manejaba las claves, teniendo una especie de plan de quedarse en la casa y seguir construyendo el segundo piso de la vivienda y trabajar en la panadería”. Rememora.
Lo anterior no cuadra con el relato realizado por el primer detenido Néstor Cuellar, quien en su versión a la policía difiere de lo dicho por los otros detenidos, Según relata los tres hombres subieron el cuerpo al furgón y luego de recorrer rumbo al norte donde luego de 15 minutos se detienen, para luego caminar cinco minutos llegando a un lugar donde proceden a cavar un hoyo.
“El Chutas le dijo (a Jonathan) “yo le ayudo”, cavando con la misma pala. En mi caso, yo no quise participar en eso a pesar que Jonathan me dijo que le ayudara. Una vez que tenían un agujero no muy profundo, Jonathan y El Chutas bajaron el cuerpo de Pedro y lo tiraron al hoyo, comenzando a rellenarlo con tierra. Al finalizar le pusieron un sillón viejo que estaba botado en un basural”.
Riesgos que tuvieron un desenlace fatal
La desaparición de Yuridia, y el relato entregado por Jonathan, generó sospechas en los familiares quienes sabían que viajar sola a otro país, no sería realizado por la fallecida, junto con ver que no había ninguna festividad en el calendario. Para la sobrina, Ana María Valdés, declara resignada que su tía siempre acogía extranjeros por un día o meses. No le importaba el tiempo, solo quería ayudar. Vivía sola, así que cuando llegaba alguien le ofrecía techo y comida.
“Siempre le decíamos a mi tío (Yuri) que dejara de entrar gente a su casa. Mi papá, que es su hermano, varias veces le echó gente de su casa porque no correspondía. La familia siempre le dijo que le podía pasar algo o le podían robar, pero él no cambiaba”.
De acuerdo a los familiares Jonathan era pareja de Yuridia, mientras los detenidos señalan que tenía su novia llamada Claudia.
“Él en ese momento estaba en pareja con Jonathan. Eso lo sabían ellos, porque en público no demostraban nada, pero mi tío a veces venía y lo presentaba como su pareja-amigo. Este muchacho ya llevaba más de un año viviendo con mi tío. Nadie se pensó que había sido capaz de hacer algo así”.
La Fiscalía de Iquique solicitó levantamiento del secreto bancario ante sospechas de que hubiese movimiento de dinero luego del asesinato. En homenaje póstumo la Caleta Caramucho de Iquique bautizará el próximo Festival de San Lorenzo como “Yuridia”.
La sobrina concluye: “La impotencia y la rabia está, más contra este tipo (Jonathan), porque mi tío le daba trabajo, comida, le daba todo. Mi tío le compraba todo lo que él quería. Que le pagara así, que mordiera la mano que le dio de comer, que le dio un techo cuando no tenía nada… Mi tío no se merecía esto”.